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Filohelenismo // Φιλελληνισμός

Cultura griega

Theodoros Vryzakis

Creo poder afirmar con seguridad que esta es la primera vez que escribo un artículo sobre pintura en el blog, pero me he dicho "¿y por qué no? Alguna vez tendrá que ser la primera". Aunque de cine recuerdo que hablé en una ocasión y ya jamás volví a entrar en ese campo (verdaderamente, si muchos supieran de mi profundo desconocimiento de cine, no ya sólo del griego, sino de cine en líneas generales, empalidecerían en el acto).

He elegido a Theodoros Vryzakis para presentarlo ante el público hispanohablante.  Natural de Tebas, vivió aproximadamente entre 1804 y 1868 y es uno de los representantes más destacados de la pintura griega del siglo XIX. Durante este siglo será muy popular en la Hélade la pintura histórica, de la cual Vryzakis se constituye como la figura principal.  Además es el primero que va a estudiar en Múnich (varios le seguirán después) y se le considera el primer pintor de la Grecia Moderna. Desde los 18 años vivió en Mónaco. En la década de 1845-1855 estuvo viajando por Europa con objeto de informarse sobre las tendencias artísticas, y permaneció en Grecia durante el periodo 1848-1850, pero después regresó a Mónaco

Hay un hecho importante que marcará su vida: la muerte de su padre en la Guerra de Independencia Griega (1821-1829), que muere durante el primer año de conflicto bélico. Retrata en su obra pictórica escenas de la Guerra de Independencia con una visión romántica y nostálgica, y representa unas figuras muy teatrales, aunque carentes de expresión facial.  Los críticos achacan este curioso fenómeno a una perspectiva propia de la mirada de un extranjero. Sus obras destacan por su gran tamaño y sus composiciones son muy ceremoniales, muchas de ellas las podemos contemplar en el Museo Benaki y en la Galería Nacional de Atenas, ambos en la capital griega.

La salida de Missolonghi

1855, La salida de Missolonghi

Η Έξοδος του Μεσολογγίου

El juramento en Santa Laura

1865 El juramento en Santa Laura 

O όρκος στην Αγία Λαύρα

Consolación

1856 Consolación

Παρηγοριά

Lord Byron en Missolonghi

1825 Lord Byron en Missolonghi

El campamento de Karaiskaki en Castela

1855 El campamento de Karaiskaki en Castela

Το στρατόπεδο του Καραϊσκάκη στην Καστέλα

Grecia agradecida

1858 Grecia agradecida

Η Ελλάς ευγνωμονούσα

 

Sobre "helenos" y "griegos"

Sobre "helenos" y "griegos"

Los dos nombres que conocemos para denominar ese país cuya capital es Atenas, son Grecia y Hélade, y provienen, una vez más, del mundo mítico. A continuación explicaré los orígenes de ambos términos.

Para los investigadores es una certeza que los griegos no son la población autóctona de Grecia, sino que llegaron a la península Balcánica en una fecha no muy bien conocida, pero se cree que debió de ocurrir en torno a 1900 a.C.

Según nos cuenta Hesíodo esta oleada de inmigrantes procedería de la zona norte de los Balcanes (concretamente, Tesalia, especifica), y allí reinaba Helén (o Heleno), hijo de Deucalión, que es el personaje que dio nombre a los pobladores con la denominación "helenos". Heleno es una forma masculina de la diosa-Luna Hele o Helena.  Helén tenía tres hijos: Juto, Eolo y Doro. Los dos últimos son los que, a su vez, dan nombre a los eolios y los dorios.  Y Juto tuvo un hijo llamado Ión, que es el que da nombre a los jonios. Así pues, he aquí ya tenemos el nombre general de este conjunto de población y también de las tres estirpes en que ellos mismos se consideraban divididos. 

Helén se casó con Orséis y se estableción en Tesalia, donde le sucedió su hijo mayor, Eolo.

Su hijo menor, Doro, emigró al monte Parnaso, y allí fundó la primera comunidad doria. El mediano, Juto, huyó a Atenas tras una acusación de robo por parte de sus hermanos, donde se casó con Creúsa, hija de Erecteo, y con ella tuvo dos hijos: Ión y Aqueo. Así que los jonios, eolios, aqueos y dorios son descendientes de Heleno, padre de todas las estirpes helenas.

Los jonios y los eolios fueron convencidos por los pobladores que ya habitaban aquellos territorios para que rindieran culto a la triple diosa y cambiaran sus costumbres sociales en consecuencia, convirtiéndose entonces en "griegos" ("graikoi"= adoradores de la Diosa Gris, o Vieja). La Parian Chronicle nos informa de que este cambio se produjo en el año 1521 a.C.

Como curiosidad, añadir que los griegos denominan a su país con un nombre derivado de Heleno, pues tenemos "Ellás" o "Elláda" (léanse "elás" y "eláda"), mientras que por lo general los extranjeros lo hacemos con el nombre derivado de la Diosa Gris, Grecia (español, catalán, rumano e italiano), Grécia (gallego y portugués), Greece (inglés), Grèce (francés), Griechenland (alemán), Grecja (polaco), Kreikka (finés), Görögország (húngaro), Grezia (vasco), Griekenland (holandés), Grekland (sueco),  Grekenland  y Hellas !!!(noruego), Recko (checo, con un sombrero vuelto sobre la R), Grækenland (danés)...

En efecto, esta parece la regla general... sin embargo también nos encontraremos con otros casos (no sé si habrá en alguna lengua más cuya denominación derive de Heleno, aparte del propio país heleno y el noruego), que se desvían de esta tónica general. Así, por ejemplo, los turcos llaman a Grecia con el siguiente nombre: Yunanistan.

La ilustración de este post corresponde a una pintura de Deucalión y Pirra, los padres de Helén, los que vivieron el diluvio universal de la mitología griega, es decir, los equivalentes de la leyenda del Arca de Noé en el cristianismo. Es un cuadro de Andrea del Minga, Deucalión y Pirra después del diluvio, del año 1570.

Una anotación sobre "Peloponeso"

Una anotación sobre "Peloponeso"

Acerca de la etimología de la palabra Peloponeso, esa interesante área de Grecia donde se hallan Micenas, Epidauro, Monemvasiá, Delfos... pues halla sus orígenes en el personaje mitológico de Pélope (Pélope + nesos=isla=  isla de Pélope), un descendiente de Tántalo. Este, a su vez, era un descendiente de Zeus, que se había establecido en el monte Sípilo, en Lidia. Tántalo invitó a los dioses Olímpicos a un banquete cuyo plato fuerte no era sino la carne troceada de su hijo Pélope, servida en un guiso. Los dioses se percataron de esta siniestra circunstancia y no quisieron probar la comida, con la excepción de Deméter que, apenada por la pérdida de su hija, mordió el trozo que le había sido ofrecido. Finalmente las divinidades revivieron a Pélope restaurándolo en el interior del caldero, y para compensar el trozo arrancado por Deméter le colocaron un hombro de marfil. En consecuencia los dioses castigaron para siempre a Tántalo, a quien condenaron a pasar eternamente hambre y sed, en medio de árboles frutales y un río que nunca podría alcanzar.

Posteriormente Pélope se instaló en la la región del Peloponeso (que luego tomó su nombre). Allí compitió en una carrera de carros con Enómao, que ofrecía la mano de su hija y su reino a quien lograra vencerle. Con la ayuda del cochero del rey, Mírtilo, Pélope obtuvo la victoria y Enómao murió en la carrera. Pélope se casó entonces con Hipodamía, la dama prometida, y eliminó a Mírtilo. De ellos nacieron varios hijos, de los cuales los dos mayores (Atreo y Tiestes) fueron instigados por su madre a que mataran a su hermano Crisipo, el preferido de su padre. Ellos se exiliaron en Micenas, y allí se disputaron el trono del lugar, de manera que finalmente fue Atreo el que resultó vencedor y lo consiguió, después se vengó y le sirvió a su hermano Tiestes en un banquete la carne de sus propios hijos. Cuando Tiestes lo supo, se alejó maldiciendo a su hermano.

Para dar cumplimiento a la venganza prometida por Tiestes, este engendró en su propia hija, Pelopia, a Egisto, aquel que al cabo de un tiempo terminaría dando muerte al primogénito de Atreo, Agamenón, el heredero de los reinos de Micenas. Tras el rapto de Helena, tanto Agamenón como su hermano Menelao (el esposo de Helena), marcharon contra Troya, para lo cual, con ánimo de ser favorecidos en su navegación, Agamenón sacrificó en Áulide a su hija Ifigenia.

En Micenas, Clitemnestra, su esposa, irritada por el sacrificio de su hija, traicionó al ausente Agamenón con su primo Egisto. Y cuando Agamenón regresó, habiendo vencido en Troya, lo asesinó -junto con su cautiva Casandra, la profetisa hija de Príamo -. Sus hijos Orestes y Electra, unos años después, se encargaron de vengar a su padre matando a su madre, y luego a Egisto.

Para la versión del mito ofrecida en el blog me he basado en la fuente de Introducción a la mitología griega de Carlos García Gual, en la Editorial Alianza.

Los dioses de la mitología griega, 3 al 11 (FIN)

Los dioses de la mitología griega, 1 y 2

Dura ocho minutos y medio cada uno, aproximadamente. Continuará otro día... :)

Aquiles en la isla de Skyros

La isla de Andros

 

La amistad en la antigua Grecia

Resulta innegable la importancia de la amistad en cualquier época y sociedad. Y cómo no, sobre ella ya emitieron su opinión algunos pensadores de la antigua Grecia.

Homero decía que no había que dejar crecer la hierba en el camino de la amistad.

Epicuro de Esparta sostenía lo siguiente: “De todo lo que la sabiduría procura al conjunto de la vida de plena felicidad, lo más importante, y de mucho, es el beneficio de la amistad”. La amistad es algo indispensable para nuestra realización, porque ella nos entrega buena parte de nuestra felicidad.

El trágico Eurípides afirmó: "En mudas circunstancias el amigo se manifiesta".

Pero el filósofo que prestó más atención al valor de la amistad fue Aristóteles. “Nadie aceptaría estar sin amigos, aun cuando poseyera todos los demás bienes”. “La amistad no sólo es necesaria, sino que es bella y honrosa. El cariño que se dispensa a los amigos nos parece uno de los más nobles sentimientos que el corazón puede abrigar”. "Los amigos se necesitan en la prosperidad y en el infortunio, puesto que el desgraciado necesita bienhechores, y el afortunado personas a quienes hacer bien. Es absurdo hacer al hombre dichoso solitario, porque nadie querría poseer todas las cosas a condición de estar sólo. Por tanto, el hombre feliz necesita amigos". Aristóteles dedica los libros VIII y IX de su Ética a Nicómaco a tratar sobre el tema de la amistad. En esta página pueden encontrar el tema de la amistad en Aristóteles de una manera más detallada.